La importancia del caballo criollo venezolano (El patriota olvidado)
Cuando el almirante Colón descubrió las Américas, en su tercer viaje trasladó consigo a un grupo de caballos. Según estudios fósiles el caballo nació en las Américas y no en otras latitudes como se había creído hasta hace algunos años, así que el almirante sin saberlo los trajo a reconquistar su tierra de origen.
Estos caballos al llegar nuevamente a estas tierras experimentaron una readaptación natural y rigurosa, cuyos factores de selección fueron múltiples: desnutrición, parásitos, plagas, enfermedades de ectoparásitos, etc., sobrellevando así un proceso de aclimatación al medio americano que permitió su sobrevivencia y reproducción.
Paradójicamente este caballo fue transportado como arma de guerra para la conquista y dominación de los pobladores indígenas, sin embargo, con el tiempo este animal fue el gran apoyo de las fuerzas patrióticas para conquistar la libertad de Venezuela y de otros países suramericanos. Es por eso, que se insiste en que por lo menos cinco naciones tienen una deuda de gratitud con estos caballos.
En el país, la Fundación para el Rescate del Caballo Criollo Venezolano es una de las organizaciones que promueve la recuperación y procreación de este biotipo y lo ha bautizado como “el patriota olvidado”, porque después de todas las hazañas logradas por décadas se le descuidó, mestizó y se permitió incólumemente su degeneración, a tal punto que está en peligro de extinción.
Con lo antes expuesto se destaca su honorable pasado, pero es preponderante mencionar su relevancia en el presente, en ese día a día del trabajo en el campo venezolano. Por su adaptación al medio, este es el caballo ideal, es el único que teniendo altas cargas parasitarias y mala nutrición logra sobrevivir a las condiciones tropicales .
Además, es infatigable ante faenas de trabajo que exigen rapidez en su carrera, en persecuciones y marchas muy distantes, ello gracias a sus características genéticas de resistencia. Los criollos son el medio de transporte en todos los predios rurales de la geografía nacional.
Estos ejemplares han demostrado ser caballos de altísimo rendimiento y máxima economía. Por ejemplo, se alimentan con una dieta muy básica y escaza, y a pesar de ello logran alcanzar pesos de hasta 400Kgs. La manutención mensual de un caballo de cualquier otra raza solo en alimento y pasto tendría un costo de Bs.2100, mientras que un criollo cuesta Bs. 120.
También parte de su extinción se debe a que su fenotipo no es el más bonito por no haber hecho hasta ahora selección zootécnica. Es importante mencionar que hay una creencia popular que cualquier caballo mal tenido y realengo es un criollo, y esto es totalmente falso.
Adicionalmente, los criollos pueden ser incorporados a otras actividades como equinoterapia por su tamaño y docilidad, deportes de carreras de largas distancias por su altísima resistencia a la fatiga y los relacionados con ganado, western, coleo, por su aptitud vaquera.
El objetivo de quienes trabajan con los caballos criollos es y será, que sea el caballo del futuro, porque cuando los nuevos ganaderos y caballistas conozcan las bondades del criollo y su economía nutricional invertirán en esta poderosa raza.
Nuestra labor es evitar su extinción, rescatándolo, promocionándolo y preservándolo. El criollo tiene características propias, todos los esfuerzos se encausaran a conservarlo y a resaltar la belleza funcional del caballo venezolano pudiendo lograr así un producto de exportación.
Por lo antes expuesto, se propone que sea declarado patrimonio nacional ya que este es el verdadero caballo del pueblo, una raza propia y porque no decirlo “el caballo del país”.
Esto tiene que ser una labor mancomunada entre quienes creemos en este proyecto y el Estado para garantizar sus logros y éxitos.
Por: M.V. Héctor Jurado Capecchi.
Publicado en: Revista Venezuela equina