Uno de los aspectos que más nos preocupa a los buenos caballistas, es poder saber cuál es el peso que podría soportar nuestro caballo a la hora de montarlo, sobretodo si se trata de paseos largos, cabalgatas, trabajo y deportes como endurance, raid y algunos otros más. Esto toma un matiz importante porque si es el caso que nos quedemos cortos en el cálculo, no pasaría nada, pero si nos excedemos en el cálculo nuestra cabalgadura evidentemente no puede rendir lo mismo y peor aún, propiciaríamos dolores y lesiones que pueden ir desde algo leve o hasta algo muy grave, incluso provocaríamos problemas de conducta. Por ejemplo, caballos que se desbocan o corcovean o no se dejan montar, es muy probable que en un paseo o trabajo anterior se le haya acarreado mucho peso o incluso una montura mal colocada o que no se ajusta a su anatomía.
Por eso, a la hora de viajar a caballo, recorrer largas distancias o practicar algún deporte ecuestre deberíamos saber cuál es el peso que cómodamente puede transportar nuestro caballo y así sacar el mejor provecho y hacer que nuestra cabalgadura sea más eficiente.
Para esto sólo se necesita un instrumento de trabajo, la cinta métrica, y si fuese posible un hipómetro. Los Sres. Crevat y Baron crearon una fórmula que es bastante sencilla y además muy fácil de aplicar, ésta me fue facilitada en al año 2003 por el Sr. Martin Hardoy, especialista e instructor de doma racional. Todo lo que se tiene que tener son algunos datos de nuestro caballo, tales como: alzada (A) y perímetro toráxico (PT), ambos medidos en metros.
Una vez que se tengan estos datos sólo queda aplicar la fórmula que dice:
Por ejemplo, uno de mis caballos, “Tabaco”, tiene una A de 1,52m y un PT de 1,80m, y el número 56 es una constante establecida por los autores Crevat y Baron. Por lo tanto,
El resultado de 119,36 Kg, es el peso que Tabaco puede transportar cómodamente. En este total deben ser incluidos el peso del jinete, la montura, las cobijas, cabezada, freno o embocadura, mantas, alforjas, riendas y demás aperos que estén colocados sobre, el caballo.
Espero que con esta simple fórmula tú caballo y tú disfruten mas el uno del otro y así poder evitar que un paseo se convierta en una pesada penitencia.
Estando un día por el año 2007 en los predios de Villa de Cura examinando unas yeguas en términos médicos en el Harás Al Rod, cuyo propietario es mi buen amigo el Ing. Pedro José Rodríguez, a las 11 a.m. llegó un señor llamado Agustín Coronel con la intención de adquirir unos ejemplares de la raza árabe, vocación racial del haras. En medio de la conversación surgió el tema del caballo criollo y a pesar de que estos señores son unos enamorados de la raza árabe, yo me desbordé haciendo un poco de historia y ahondando en las bondades de nuestro caballo criollo venezolano.
A los treinta minutos de conversación, en la cual yo les estoy explicando sobre el Proyecto del Rescate del Patriota Olvidado, su riesgo de extinción y los mas de nueve mil kilómetros que para la fecha habíamos recorrido mi socio, Daniel Uranga, y yo buscando yeguas criollas, logro descubrir en el rostro de este sujeto desconocido hasta entonces, una expresión de bondad o alegría o satisfacción, pero a la vez de duda y es en ese momento cuando Agustín Coronel muy educadamente pone freno a mi verborrágico y apasionado monologo por el criollo y me dice:
– Héctor, después de toda esta explicación ahora tengo dudas, fíjate yo en mi finca creo que tengo unas yeguas criollas. Hagamos algo, acércate por allá y si son criollas yo te donaré una para tu proyecto.
A los quince días, llegaba a su finca en compañía de Pedro José, otro apasionado de los caballos. Aproximadamente a las 7p.m., casi sin luz, me dirigí al corral donde estaban encerradas un grupo de yeguas, pero debido a la oscuridad me fue imposible evaluarlas. Entre la ansiedad y la decepción de haber recorrido tantos kilómetros y no poder evaluar las características morfológicas de los animales por falta de luz, decidí salirme del corral y así evitar más riesgos personales ya que el atajo estaba nervioso, pero al momento de la decisión una yegua rucia me da el frente y se me queda mirando fijamente y hasta permite cierto acercamiento De igual manera me es imposible evaluarla por las condiciones del ambiente y en esa mediana distancia le digo a la yegua hablando a solas con ella en voz alta:
– Mañana te veo, si eres criolla vas a ser mía.
Me retiré del lugar, cenamos, compartimos un rato y a dormir. Por supuesto, como toda noche llena de ansiedad, fue mas larga que un “día con hambre”… pero al fin amaneció. Al salir los primeros rayos de luz estaba yo en el corral. Trato de identificar a la yegua que medio el frente la noche anterior y no la veo, solo miro como es ya una indeseable costumbre mestizas y acriolladas, … finalmente una yegüita castaña es criolla, por lo menos no se perdió el viaje pensé yo en mis adentros, encontré una criolla entre quince ejemplares. Continúo evaluando hasta que apareció dentro del pelotón y después de un buen tiempo de búsqueda y evaluación la yegua de anoche. Muy despacio rompí el pelotón, casi como un cirujano que hace una disección, y logré apartarle un poco, acto seguido me dio el frente como la noche anterior mirándome fijo y allí quedo sola conmigo aparte del grupo.
Mía preparada para la muestra de sangre (Apure – 2007)
En este momento inicio una detallada y minuciosa evaluación, dorso, cruz, cabeza, perfil fronto-nasal, inserción de cuello, ángulo entre cuello y pecho, grupa, inserción de cola, castañas, cañas, rodillas, cuartillas, y así como hice con el resto de los animales, hubo una gran diferencia, entre ella y el resto de los ejemplares y era que cada vez que evaluaba una región de su cuerpo y su contexto morfológico, ella me decía positivamente: “Soy criolla”. Y así fue creciendo la emoción en mí y llegue a varias conclusiones. Primero di gracias a Dios ya que no perdí el viaje, segundo de todo el atajo solo dos son criollas, eso fue buenísimo para lo que nos ha tocado ver. Atajo tras atajo de puras mestizas. Y tercero esa yegua era criolla, de mejor alzada que la castaña, y como se lo prometí, sería mía y se llamaría Mía.
Lo que seguía no era menos importante, les di la noticia a mis amigos con mucho entusiasmo, pero caí en cuenta que me faltaba extráele la sangre para realizarle el test de Coggins, y solo si estaba negativa ingresaría al proyecto, pero ya hasta aquí el viaje había sido un éxito. Ahora a sacar sangre, por supuesto sangre a todos los ejemplares, y al terminar supe que Mía estaba domada y no me aguanté, tenía que montarla, sentirla a ella y que ella me sintiera a mí, porque era mía. Al pasear con ella por el interior de la finca me percaté que tenía un defecto al dar el galope, pues no podía desarrollarlo, y la verdad era lo que menos me preocupaba, porque lo que necesitábamos era un vientre para la cría.
Llegó el resultado del Coggins, ¡qué alegría! Negativo, la transportamos hasta calabozo (Edo. Guárico), donde quedaba el centro piloto del proyecto y allí se integró al atajo junto con una potranca que trajo al pie, la cual se llamó Turumba se la regaló el Sr. Coronel a Pedro José, por haberle manifestado su admiración al caballo criollo pero que nunca había tenido uno. Ahora Turumba esta en el haras Al Rod y no va a ser mestizada, sino servida con criollos para conservar su estirpe.
Una semana mas tarde, comenzó a echarse en el potrero y a quedar como adolorida, cuando caminaba rengueaba y me plantee este es el defecto que tenía al galopar (tripanosomiasis) ese fue mi diagnóstico presuntivo, por supuesto. Se realizó en tratamiento y efectivamente desapareció el defecto.
Esa yegua fue tan buena madre que en el verano de este año, específicamente en Abril del 2009, casi sin pasto y amamantando a una potranca llego a pesar 429 Kgs. Esta historia es apenas un esbozo de con las que cuenta el proyecto. En Agosto de este año se traslado el centro piloto al Edo. Miranda, transportando un total de 19 ejemplares, 6 yeguas madres incluyendo a Mía y 13 jóvenes entre potros y potrancas. El viaje fue muy fuerte, estuvieron encerrados en los corrales durante 24 horas antes del embarque, sin beber ni comer nada, con el calor del llano, y además 8 horas de viaje. Llegaron bien y sin novedad como buenos criollos. La oferta forrajera en la nueva finca es muy escaza y se usaron a Mía y a Media Luna, dos yeguas mansas y domadas, para que el encargado cortara y transportara pasto fuera de las instalaciones de la nueva finca. Entre el viaje, el poco pasto y la lactación, Mía bajo un poco de peso, pero nada que pueda afectar al rendimiento del criollo. Aquí les presento algunas medidas, en un artículo anterior les presente la fórmula de Barón y Crevat; perímetro toráxico 165cm; estando en condición de delgadez; alzada 142 cm; perímetro de caña 18 cm. Con estas medidas esta yegua podía acarrear cómodamente un peso de 107,36Kgs..
A la semana de haber realizado estas mediciones Mía falleció accidentalmente electrocutada, lo cual me lleno de profundo pesar. Murió, pero dejo tres crías: Turumba, Joropo y Garúa. Además dejo muchas ilusiones vivas y ganas de seguir trabajando, para que nuestro caballo criollo siga viviendo y sirviendo.
Aquí les transcribo un poema de un autor Rio Platense que enaltece a su criollo que también es el nuestro ya que tienen el mismo origen.
De Izq. A derecha, Mía y Héctor Jurado; Yeguita Castaña y el encargado; El Rucio y P. Rodriguez. Todos los ejemplares son criollos.
Caballito criollo del galope corto,
Del aliento largo y el instinto fiel
Caballito criollo que fue como un asta
para la bandera que anduvo sobre él
¡caballito criollo que de puro heroico
se alejo una tarde debajo de su Ombú
Y en alas de extraños afanes de gloria
Se trepó a los Andes y se fue al Perú!
¡Se alzará algún día
Caballito criollo sobre una eminencia
Un overo en pie
Y estará tallada su figura en bronce
Caballito criollo que pasó y se fue! Belizario Roldán.
Autor del poema
Hasta ahora que Dios no ha variado el mundo en su fondo sino en su forma, el Tao y su filosofía, nos deparan gratos y sorprendentes momentos, tanto en lo terapéutico como en lo predictivo, siempre y cuando trabajemos con conocimiento de causa y no como empíricos cualitativos.
El arte de escoger el sexo, se refiere a varios factores como: tiempo de capacitación espermática, momento de ovulación y tiempo de encuentro entre el espermatozoide y el óvulo para que se produzca la concepción.
Hasta aquí no hay más que un recordatorio de lo que es una simple fisiología reproductiva, pero, ¿qué podemos hacer para decidir sobre el sexo de ese o esos productos? Para tomar la decisión sobre si ese o esos productos van a ser machos o hembras es obligatorio considerar los factores fisiológicos antes mencionados y por supuesto llevarlos a la teoría del Tao.
Recordando que el Tao esta compuesto por sus dos integrantes que son el Yin y el Yang, son la representación de lo que es en nuestro universo lo antagónico pero a su vez lo complementario, por ejemplo:
Teniendo claro ésto, es preciso conocer que el Tao nos recuerda que el universo es cambiante y por lo tanto es relativo y no absoluto. Esto quiere decir que aunque el Yin sea femenino también posee algo de masculino Yang y viceversa. Es así como en un día de 24 horas existen horas Yin, horas Yang, horas Yin-Yang y horas Yang-Yin.
Al observar la figura del Tao, las 24 horas se representan de la siguiente manera:
Luego de entender que las horas del día también pertenecen a la energía Yin y a la energía Yang, sólo nos queda planificar la hora de la monta natural o la hora de la inseminación artificial, para que una vez que la hembra este ovulando, hagamos coincidir el tiempo de capacitación espermática y el tiempo de encuentro de esos espermatozoides con ese o esos óvulos en un horario Yin (si es que queremos hembras) o en un horario Yang (si es que queremos machos). Teniendo cuidado de no correr el riesgo de caer en lo que yo llamo la zona de indefinición horaria del Tao, que serían las horas Yang-Yin o las Yin-Yang, es decir, las horas comprendidas entre las 10 de la noche y las 2 de la madrugada en el caso Yin- Yang o desde las 10 de la mañana hasta las 2 de la tarde en el caso Yang-Yin. Así, por ejemplo, si nosotros lo que queremos en nuestra próxima cría es una hembra, la planificación de la monta quedaría así:
Por lo tanto, es requisito fundamental, para predecir el sexo de tus próximos productos, saber cual es el tiempo que tarda la capacitación espermática de esa especie (canino, equino, hombre, etc…). El tiempo que tardan esos espermatozoides en llegar al encuentro del óvulo para la fecundación y por último, saber que si esa hembra que va a ser sometida al proceso esta ovulando, para que entonces no dejemos todo este proceso al azar sino que podamos hacerlo con conocimiento de causa. Esto se puede corroborar en caso de las yeguas con una simple palpación transrectal o una ecografía.
Si se cumplen con estos simples detalles les aseguro que en hembras multíparas tendrán resultados que oscilan entre 70-80% de éxito y en hembras uníparas, como es el caso de la yegua, un 100%.
Este es mi último producto deseado y planificado por este método, esta es Vikina con 10 horas de nacida cuando le hacía parte del imprinting.
Después de todo esto quiero invitar a aquellos colegas que se dedican a la gineco-obstetricia, que en la lista de preguntas que deben existir en un cuestionario anamnésico antes de los procesos reproductivos, agreguen una más: Sra. o Sr. ¿qué le gustaría tener en su próxima camada, machos o hembras?.
Breve Reseña del Caballo que llegó a Hispanoamérica:
La fenotípica de los pocos caballos criollos puros que aún existen en Venezuela demuestran que, contrariamente a lo que muchas personas expresan, esta caballada no desciende directamente del caballo Andaluz, sino que apunta a características raciales fenotípicas de un caballo diferente, por otra parte algunos registros históricos así lo constatan.
Para abordar las características raciales del caballo criollo es importante reseñar brevemente la historia del caballo en la Península Ibérica. Según el médico veterinario Gavín, A., de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de León – España, comenta que esta especie aparece en esa región a principios de la edad de hierro, además, concluye en su revisión que de esta zona descienden casi todos los caballos que llegaron a América en la época de la Conquista. Pero, también se conoce que en el milenio anterior a la venida de Jesucristo, Plinio El Viejo confirmaba la existencia de tres morfotipos de caballos en la Península, los cuales son:
Comparación entre los dos caballos Ibéricos primitivos: el pony Ibérico (hoy conocido como Garrano) y el caballo Ibérico que evolucionó hasta el caballo Lusitano de nuestros días (adaptado de Farinha y Correia, 2005)
1) El Ibérico, fue introducido por el sur en la Península Ibérica por los Bereberes, se extendieron por esos lares recibiendo la denominación de iberos. Este morfotipo poseía una morfología semejante a la del caballo africano berberisco, se caracterizaba por presentar un cuerpo regular, bella cabeza y ancas feas, de medidas eumétricas y de tipo mongólico, de perfil convexo y grupa redondeada.
2) El Fieldón, era un ejemplar eumétrico, de unas siete cuartas de alzada de tipo tarpanico, con una cabeza grande de perfil recto, cuello corto y recto, pecho estrecho y una grupa tendiendo a la horizontalidad. Una de las características más resaltantes de este morfotipo era el paso en ambladura o andadura. Se dice que eran caballos grandes y de valor.
3) El Asturcon, es un caballo de menor tamaño, usualmente de zonas montañosas, pero confinado a la zona de Asturias. Este morfotipo no tuvo mayor influencia en la formación de la caballada ibérica por las limitaciones topográficas.
Con la conquista de los árabes a la región, ellos seleccionaron y mejoraron al caballo que allí encontraron, quizás hicieron algunas cruzas con caballos indígenas de la Península como por ejemplo el Soraya, y obtuvieron el caballo del Al-Andaluz o Andalucí. Posteriormente, cuando los cristianos reconquistarían sus tierras, crearon una yeguada en Valdeburón, cerca de los Picos de Europa, donde se criaban caballos Fieldones, dando origen a la raza Castellano-Leonesa. Esta se caracterizaba por no ser muy grandes, pues no solían rebasar las siete cuartas de alzada, su cabeza era grande, recta y descarnada, su cuello corto recto y delgado, su cruz alta, su dorso semirrecto, ancho, aplomos regulares, articulaciones enjutas y con pelo basto.
Con esta raza de caballos los cristianos hicieron toda la reconquista de la Península, se comenta que en aquellos tiempos, en los que se peleaba con armaduras y arneses de hierro y donde el caballo sufría la fatiga de la guerra cargado con 13 a 14 arrobas de peso (la arroba equivale a 25 kg), prueban con suficiencia la abundante bondad y guapeza de los caballos Castellanos-Leoneses en la edad media. Durante esa época se produce el enfrentamiento de dos religiones, dos culturas, dos tácticas de guerra, dos caballerías y por supuesto, de dos tipos de caballos.
Como anécdota curiosa, se registró que los Cristianos como táctica de guerra trataban de arrollar al enemigo mediante el choque frontal, con una formación en bloque, con caballeros cubiertos de armaduras, montados a la brida con unos caballos muy fuertes cubiertos también de armaduras y embrazando el lanzón, este era el Caballo Castellano Leones. Por su parte, los Musulmanes trataban de evitar el choque frontal rodeando al enemigo con nubes de flechas hasta agotarlo y acabarlo, usando caballos mas ligeros, los Andalusís, los cuales no llevaban armaduras y los montaban a la jineta.
Representación de Saladino venciendo a Guido de Luriñám, rey de Jerusalén, le arrebata la Santa Cruz, según el códice del Corpus Christi (Hacia1.240. Corpus Christi College. Cambrige).
Años más tarde, Alfonso VIII en la Batalla de la Navas de Tolosa, abre el paso de Despeñaperros hacia al Valle de Guadalquivir. Gracias a él, Fernando III penetra con sus tropas, y finalmente después de 28 años de guerra conquista todo el Al-Andaluz, excepto el reino de Granada. Una vez dominados los Mudejares se les prohibía la posesión de caballos que les permitieran levantarse en armas, por lo cual ellos se vieron obligados a cruzar sus yeguas con caballos Castellano-Leoneses, dejando las potrancas en España para seguir la producción de mulas y los potros los vendían en Portugal. Del cruce de las yeguas Andalusís con los caballos Castellano-Leones, se dio origen a unos productos de los que la Lafont-Pauloti dijo que “…parecían haber sido creados por la naturaleza para el modelo de la fuerza reunida con agilidad”. Mas tarde, estos caballos comenzaron a llamarse Andaluces y el caballo Castellano-Leones se reservó en este tiempo para las tropas que se enviaban a la conquista de América.
Con los párrafos anteriores se pudiera deducir que la base del caballo criollo hispanoamericano tiene un origen más cercano al caballo Castellano-Leones que al Andaluz. Probablemente, con el tiempo llegasen caballos Andaluces, sobre todo a los Virreinatos de América, pero también han debido llegar algunos ejemplares para ciertos nobles de las Capitanías Generales como la de Venezuela, dando así quizás algunas pinceladas de sangre andaluza a algunos rebaños.
Caballo Criollo Venezolano
Con el tiempo estos caballos que escaparon y se transformaron en cimarrones, sufrieron los rigores de una selección natural extremadamente dura, ya que además de tener poca oferta forrajera y de muy mala calidad producto de la acidez de las tierras, a períodos secos y otros de extrema humedad, también tuvieron que enfrentarse a altas cargas parasitarias propias del trópico, entiéndase endoparásitos y ectoparásitos. Estas condiciones solo permitían la supervivencia de los más aptos, eliminado así a aquellos ejemplares de menor resistencia. El resultado final, es sin lugar a dudas, uno de los caballos, por no decir el caballo mas resistente del Mundo, con un genoma que pudiera considerarse como único y que debe tomarse en cuenta como Patrimonio de la Humanidad.
Yegua Criolla Venezolana
La selección natural y la ausencia de criterios zootécnicos, han hecho del criollo un animal de muy poca alzada, de inserciones algo defectuosas y un caballo poco representativo según la apreciación de algunos caballistas. Considerando las premisas de valorar lo importado como mejor, se olvido al caballo venezolano o peor aún se mestizó creyendo que así se mejoraría su raza, el resultado fue, en el mejor de los casos, un mestizo mejorado gracias a la resistencia y nobleza del criollo, el cual en nuestro criterio es El Gran Patriota Olvidado ya que contribuyó a libertar a cinco naciones del yugo español. Sin este patriota, la libertad de la América no hubiese sido posible, ya que el caballo criollo argentino, el uruguayo, el paraguayo, el mejicano y el venezolano tienen todos un tronco común.
Con todo lo anterior se quiere reflejar la guapeza, resistencia y nobleza del caballo venezolano, el cual ha sido y es herramienta fundamental en las labores del campo, pero preocupa que actualmente se esté extinguiendo. Sin duda alguna, los pocos criollos que han sobrevivido siguen gozando de un prestigio ancestral, pero carecen de prestancia, la intención es dirigir todos los esfuerzos posibles a recuperar a este patrimonio nacional y además, se pretende devolverle el galardón que tuvo en su época de gloria. Con ánimos de aclarar conceptos y acabar con falsas creencias, es fundamental comentar que son pocos los verdaderos criollos que quedan y no como piensa el colectivo que todo equino realengo y mal tenido es un caballo criollo. En esos casos se trata de mestizos o ejemplares degenerados que poco o nada tienen que ver con el aún existente y escaso caballo criollo. Son pocos y bien delimitados los reductos de caballos verdaderamente criollos, siendo quizás los más significativos los atajos de algunas zonas de los estados Apure, Guárico y Anzoátegui, entre otras.
Cría con estándares calificados.
Aproximación del Proyecto Piloto:
El objeto del presente proyecto es rescatar y preservar el reservorio genético del caballo criollo, para ello es imperativa la extracción y rescate de vientres seleccionados en una yeguada mínima de 20 ejemplares, así como también de un padrillo escogido. Como condición todos estos ejemplares deben estar libres de anemia infecciosa equina. Dicha selección la realizará un grupo de profesionales y técnicos, con conocimientos específicos del biotipo y se llevará a cabo en las unidades de producción donde es conocida la existencia de reductos de ejemplares pertenecientes al biotipo.
Una vez seleccionados los ejemplares, serán trasladados al centro piloto en la ciudad de Calabozo-Edo. Guárico, lugar que cuenta con una unidad de producción libre de anemia infecciosa equina, dispone de potreros aptos para los fines de selección, doma racional y reproducción de los caballos. Adicionalmente, se implementará un riguroso plan sanitario y nutricional.
La meta a mediano plazo, cinco años, es lograr mínimo cuarenta ejemplares de caballos criollos con mejor conformación músculo-esquelética y de mayor alzada, para así conservar en una mejor forma toda la actual rusticidad, guapeza y funcionalidad del equino nacional. Una vez alcanzada esta meta, el centro piloto servirá de agente difusor y multiplicador a nivel nacional del material genético resultante, con la misión de fungir como factores reproductores de calidad para las zonas donde se encuentren las yeguadas existentes que así lo requieran.
En el país existen instituciones académicas que también se han abocado al estudio del caballo criollo, como por ejemplo, la Cátedra Libre del Caballo Criollo de la Universidad Centro Occidental Lisandro Alvarado (U.C.L.A.), dirigida por el Doctor M.V. José Luis Canelón, quienes seguramente apoyarán todo proyecto dirigido al rescate del caballo criollo, ya que se vincula al presente proyecto por la comunión de los objetivos planteados, el rescate del “Noble Olvidado”, denominación de dicha Cátedra del Caballo Criollo.
Escrito por M.V. Héctor Jurado Capecchi, vetjurado@yahoo.com y Daniel Uranga D.
Si una persona en una empresa no está conforme con lo que está haciendo, o lo que gana, o el ambiente humano que le rodea, esa persona sin saberlo es una fuga energética para la empresa. Cuando hay tanta gente inconforme es una gran fuga energética. No importa mucho lo que ganes, si no que disfrutes lo que haces.
Hay personas que ganan poco y son hiperfelices, otros no saben la cantidad que ganan y tienen que comprar compañía, sexo…Puedes comprar sexo, pero no amor; puedes comprar compañía, pero no compasión; o comprar 7000 gandólas de bombonas de oxígeno, pero no un solo pulmón que lo respire por ti… de qué te vale eso? Hay ricos tan ricos, que lo único que tienen en descompensación es dinero. La idea es ser próspero, que a lo mejor no tienen todo el dinero del rico, pero tiene todo cuanto quiere.
Hay quienes pasan la vida haciendo lo que tienen que hacer, lo que debe hacer y no lo que quiere hacer, se la pasan durmiendo con quien tienen que dormir, comiendo lo que tienen que comer, haciendo lo que tienen que hacer…eso es una agonía prolongada! Es vivir muriendo. La muerte dura un segundo y no duele. El desprendimiento viene en plano consciente. Vinimos a gozar un pullero, a una experiencia de crecimiento, a gozar en cantidad, responsablemente.
Si tienes que hacer algo porque sí, cambia la polaridad convirtiéndolo en “querer” para hacer las cosas más agradables para que cambie todo. “Cómo será de hacer el amor sabroso, que hasta morrocoy canta”, decía mi abuelo. No hay nada más tedioso que hacer el amor sin ganas, o con alguien que no nos gusta, es una tortura. Ello demuestra una falta de coherencia, es no estar alineados en mente, alma y cuerpo, evidentemente el cuerpo pega el grito y salen las enfermedades por incoherencia.
En la rama de medicina alternativa el Dr. Héctor Jurado, médico veterinario practica todas las no farmacológicas. Ninguna tiene ingrediente activo químico, o farmacológico, sino ingrediente activo energético. Por ejemplo, la acupuntura, el Reiki, la homeopatía, las esencias florales, la energía universal. Hay inyecciones homeopáticas que son tan exageradamente diluidas que equivalen a una gota de cualquier ingrediente activo diluido en el océano Atlántico. Lo que queda es la memoria energética de ese producto que generará un cambio físico en ese organismo donde se aplicará. No practica Terapia alternativa con ingrediente activo farmacológico, ni practica la herbolaria porque esa si tienen ingrediente activo farmacológico. Un té de cayena para que el paciente duerma tiene un alcaloide, o ingrediente activo farmacológico y actúa como “llave cerradura”, o efecto y efector. En la Medicina complementaria que ejerce no hay ingrediente activo farmacológico, sino energético.
El puente de amor entre la mascota y el dueño es una nueva rama de la medicina llamada sintergética, que es la síntesis, o suma de la energía y para hacerlo tenemos que hacer sumatoria de todas las terapias que componen nuestro Universo desde la ayurveda, pasando por la acupuntura, homeopatía, energía cósmica, Reiki, medicina alopática hasta la cirugía se hace una sintergia, o síntesis de la energía. Las cosas no son ni buenas, ni malas, sino productivas, o improductivas, siempre es mejor sumar que restar, nunca dividir y siempre multiplicar.
Entrevista realiada al M.V Héctor Jurado Capecchi @VetJurado